Cuatro volúmenes de vidrio y acero que se articulan, dos a dos, por los atrios de 7 plantas de altura y se estructuran alrededor de estanques en un amplio parque ajardinado.
El espacio creado por los dos edificios configuran el propio jardín que afirma su integración a través del tratamiento del suelo, uniendo porches y exteriores hasta formar en el centro un «mapa imaginario» como símbolo de la «Universalidad del Habitat».